¡Glorioso San Expedito,
mártir, protector nuestro!
Reconocido por todos los fieles
por el maravilloso y benefactor
don, que nuestro Padre
Misericordioso te concedió,
para resolver nuestras necesidades
de forma urgente y satisfactoria.
San Expedito, nuestro santo
amado, sabiendo tu gran
valimiento ante Dios, hoy venimos
a presentarte nuestras súplicas.
San Expedito bendito,
tú que fuiste tocado
por la gracia de Dios
y recibiste la Luz Divina
conoces nuestras necesidades
más urgentes, nuestros
preocupaciones con el trabajo,
nuestras dificultades económicas,
nuestros problemas familiares,
por ello venimos a invocarte
como nuestro santo patrón
y a poner nuestras fatalidades
y carencias en tus manos:
(hacer la petición).
Esperamos que nos
alcances ante Dios una muy
urgente y favorable solución.
Deseamos sentir hoy mismo
tu protección.
A la vez te pedimos que nos
obtengas de Dios una fe firme
que jamás desfallezca,
una ardiente caridad que nos
inflame en su Amor
y en el amor a los demás,
nuestros hermanos los hombres,
así como una esperanza y
confianza alegre aún en medio
de nuestros problemas.
Lo suplicamos por Jesucristo,
nuestro Señor.
Amén.
Rezar tres Padrenuestros,
tres Avemarías y tres Glorias.